Diferencias entre un Seguro de vida y un Seguro de Decesos

Continuamente nos llegan algún tipo de dudas, de gente que no sabe si el seguro de vida incluye decesos, de qué diferencia a un seguro de vida a uno de decesos. Y es cierto que los dos seguros “dependen” de la muerte, pero su finalidad y coberturas son muy diferentes.

Seguro de vida y decesos

Es cierto que entre el seguro de vida y el de decesos hay una conexión muy clara, y es que se activan tras el fallecimiento del asegurado.
En un caso ofreciendo un capital garantizado a los beneficiarios designados y en el otro cubriendo los gastos del funeral y haciéndose cargo de todo el servicio funerario, pero hasta ahí llega su relación, existen muchas más diferencias que similitudes, como:

Objetivo
Mientras que el seguro de decesos ofrece un dinero para cubrir los gastos del funeral (flores, tanatorio, coche fúnebre, entierro, incineración…), el seguro de vida ofrece un dinero que puede valer para muchas cosas, puede usarse para cubrir los gastos de educación de los hijos, para mantener un determinado estilo de vida, para amortizar la hipoteca, para pagar deudas pendientes… Es decir, que el seguro de decesos tiene una limitación temporal, dada la rapidez con que hay que montar el funeral tras el fallecimiento, mientras que el seguro de vida no tiene esa limitación.
Flexibilidad
En la línea del punto anterior, se puede decir que el seguro de vida es más flexible, ya que el capital no tiene una sola finalidad como sí pasa en el seguro de decesos. Y además un seguro de vida puede cubrir otros casos como la invalidez o una enfermedad grave.
Precio
Tampoco tiene el mismo precio contratar un seguro de vida que uno de decesos, este último es bastante más económico.
Por ejemplo, una persona de 40 años tiene seguros de decesos desde 17€/año, mientras que con esa misma edad el precio más económico para un seguro de vida es de 33€/año, casi el doble.
Otras coberturas
El seguro de vida permite asegurar los casos de incapacidad absoluta y permanente, no solo los de fallecimiento. Esta cobertura sirve para garantizar el futuro del asegurado, le otorga el capital garantizado al asegurado, si sufre un accidente o enfermedad q lo deje incapacitado para realizar ningún trabajo.
Esta es la gran diferencia en cuanto a las coberturas de un seguro de vida y uno de decesos, que el primero permite cubrirse también en esta dirección. Aunque las prestaciones de invalidez son opcionales, por lo que el precio sube de forma ostensible.

La contratación de estos seguros ha ido aumentando exponencialmente, buscando la tranquilidad de los seres queridos tras el duro golpe.
Ambos seguros cubren el mismo riesgo, el fallecimiento del asegurado, sin embargo, no lo hacen de la misma forma, los dos tienen como finalidad liberar a los familiares y su economía tras el fallecimiento pero actúan en diferentes direcciones y con parámetros y coberturas muy distintos.
Hay que recalcar que existen grandes diferencias entre los seguros de vida y los seguros de decesos. Además los dos seguros cuentan luego con multitud de modalidades donde elegir, haciendo, aún, más específico el tipo de seguro que quieres y/o necesitas.

A medida que cumplimos años y vamos pasando por diferentes etapas de la vida, nos enfrentamos a incertidumbres y miedos que nos hacen pensar en nuestro futuro y el de nuestros seres queridos. Dos productos clave en la industria de seguros son los seguros de vida y los seguros de decesos, también conocidos como seguros de entierro o muerte.

Cuando se trata del tema del seguro de vida, muchas personas nos preguntan si tiene alguna relación con el seguro de decesos o si incluye los gastos del funeral, entierro o incineración. Si bien la respuesta a esta pregunta no es del todo sencilla, hay algunas cosas importantes a tener en cuenta cuando se trata de la relación entre el seguro de vida y el seguro de decesos. Ambos ofrecen protección de diferentes maneras, pero tienen características únicas que uno debe comprender antes de elegir la cobertura adecuada.

¿El seguro de vida incluye decesos?

El seguro de vida es un servicio esencial para aquellos que quieren garantizar la estabilidad económica de sus seres queridos en caso de fallecimiento, permitirles seguir con un determinado estilo de vida pese al fallecimiento.

Sin embargo, cuando se trata de entender todos los términos y las prestaciones del seguro, siempre surgen una serie de dudas. Una de las preguntas más comunes que nos hacen es si el seguro de vida incluye los gastos de decesos.

En primer lugar, es vital entender la principal diferencia que hay entre un seguro de vida y un seguro de decesos, ya que no cubren lo mismo.

En el seguro de vida el asegurado paga una prima a la compañía de seguros a cambio de una suma de dinero que se pagará a los beneficiarios designados en caso de fallecimiento del asegurado.

Por otro lado, en el seguro de decesos el asegurado paga una cuota a cambio de que cuando fallezca queden cubiertos los gastos relacionados con el fallecimiento, como el sepelio, traslado funerario, funeral, entierro…

Ambos están relacionados con la muerte pero el sentido y el objetivo de cada uno es totalmente diferente.

Es importante tener claro que el seguro de vida y el seguro de decesos son dos tipos de seguros diferentes y tienen diferentes coberturas. El seguro de vida no cubre los gastos de decesos directamente, con un seguro de vida no se cubre nada del funeral, entierro o incineración.

Aunque, dependiendo de la póliza de seguro que contrates, algunos seguros de vida sí que incluyen alguna ayuda o anticipo del capital en caso de fallecimiento que pueda ayudar a cubrir los gastos de decesos.

La cobertura de ayuda en caso de fallecimiento es una prestación adicional que puedes incluir en tu póliza de seguro de vida, casi en ningún caso viene ya incluida, es opcional.

Esta cobertura, también conocida como de asistencia al sepelio, anticipa parte del capital de la póliza para que los beneficiarios puedan pagar todos los gastos del sepelio, una cantidad que está entre los 3.000€-5.000€. A esta prestación le suelen añadir un anticipo para el pago del impuesto de sucesiones, otro gasto que los herederos tienen que afrontar tras el fallecimiento.

Como hemos dicho, lo habitual es que se trate de un adelanto del capital total, no de un dinero adicional.

Esta cantidad de dinero suele ser limitada y puede variar según la aseguradora y la póliza que contrates. Es importante saber que esta compensación económica en caso de fallecimiento no es obligatoria, la encontrarías entre las coberturas adicionales y no todas las aseguradoras ofrecen esta opción.

En conclusión, el seguro de vida no incluye coberturas de decesos directamente, sin embargo, es posible que puedas añadir servicios para ayudar a cubrir los gastos derivados del servicio funerario en caso de fallecimiento. Asegúrate de revisar las opciones de tu póliza de seguro de vida y considerar todas las opciones disponibles antes de decidir qué tipo de seguro contratar.

Lo que tienen en común ambas pólizas es que tienen efecto tras el fallecimiento del asegurado y pretender hacer más fácil la vida de sus seres queridos.

Las pólizas de seguro de vida están diseñadas para brindar protección financiera a sus seres queridos en caso de una muerte prematura, mientras que los gastos funerarios generalmente se refieren a los costes asociados con los arreglos finales, como el ataúd, las tarifas de entierro o cremación y otros gastos relacionados.

Es muy común confundir el seguro de vida y el seguro de decesos, si acaso se podrían considerar complementarios. Pero tienen coberturas totalmente diferentes. La persona que deba tratar estos temas en la familia debería informarse de las condiciones que esgrimimos a continuación:

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¿Qué es un Seguro de Vida y qué es un Seguro de Decesos?

Seguro de Vida

El seguro de vida ofrece una indemnización económica a los beneficiarios en caso de fallecimiento del asegurado de tal forma que en caso de fallecimiento del asegurado sus seres queridos mantienen la estabilidad económica. La indemnización posterior a la muerte es la principal motivación de la contratación del seguro de vida, pero también puede contratarse para cubrir casos de invalidez absoluta y permanente. Con este seguro, las obligaciones económicas de los beneficiarios sufren un impacto menor, amortiguan la perdida en esa dirección.

  • Los beneficiarios reciben una indemnización económica tras la muerte del tomador.

Seguro de Decesos

El seguro de decesos se encarga de asumir los gastos asociados al fallecimiento del asegurado hasta el capital contratado, es decir el servicio funerario, traslados, todos los trámites burocráticos y legales asociados al fallecimiento. Todos los tramites administrativos derivados de este suceso también los ocupa, libera a los familiares de la preocupación de tratar con los diferentes estamentos y de gestionar los papeles o documentos.

  • La aseguradora presta un servicio funerario para la celebración del entierro.

Seguros de Vida y Seguros de Decesos:
similitudes y diferencias

La principal diferencia entre un seguro de vida y un seguro de decesos es el propósito y las coberturas que ofrecen.

Si bien las dos cubren el riesgo de fallecimiento, mientras que el seguro de vida ofrece una compensación económica a los beneficiarios del titular de la póliza, que estos podrán gastar como quieran, la póliza de decesos cubre los gastos funerarios del titular de la póliza, el dinero se emplea en cubrir los gastos relacionados con el fallecimiento, como el sepelio, la repatriación, la cremación y otros gastos funerarios.

También se puede considerar que el seguro de vida es más multifuncional, ofrece más servicios que solo el pago por fallecimiento. Protege al asegurado frente a incapacidad permanente o temporal, permite asegurar el pago de préstamos o hipotecas y suelen incluir prestaciones médicas.

La póliza de vida ofrece un pago a los beneficiarios, que se puede usar para cubrir gastos como la hipoteca, educación o gastos de manutención. Se diferencian en que en uno el dinero va íntegro (tras impuestos) a los beneficiarios y en decesos, el dinero va dedicado a los gastos del entierro o incineración.

Además de esto, para resumir las diferencias en cuanto a coberturas, aquí te ofrecemos un listado de las prestaciones que ofrecen ambos seguros:

SEGURO DE VIDA SEGURO DE DECESOS
Servicio Funerario Completo
Traslado Nacional e Internacional de restos mortales
Indemnización para los beneficiarios en caso fallecimiento
Asistencia Jurídica y Gestoria
Elaboración online de Testamento
Borrado de la Vida digital
   

¿Es el seguro de vida una alternativa al seguro de decesos?

Lo cierto es que sí. De igual forma que ambos son complementarios también pueden considerarse productos sustitutivos, dado su principal objetivo, que es el proporcionar estabilidad económica a los familiares del asegurado fallecido.

Siendo más concretos, incluso algunos seguros de vida cubren el adelanto de capital para los gastos de sepelio. Una cobertura por la que la compañía adelanta parte del capital de la póliza para que los familiares puedan pagar los gastos del funeral, una prestación que da tranquilidad a la familia, ya que no todas pueden afrontar ese gasto de 4.000-5000€ de forma tan repentina.
Es una cobertura que suele ir unida al adelanto de capital para los gastos del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, que es otra obligación tras el fallecimiento, al menos, si se pretende aceptar el testamento del fallecido.

No todas las compañías ofrecen esta cobertura, pero sí que es cada vez más frecuente que se incluya entre sus garantías opcionales, aquí te dejamos un cuadro comparativo con las aseguradoras que adelantan este capital, así como la cantidad máxima que ofrecen:

Asegurado Seguro Decesos Reale Seguro Decesos Fiatc Seguro Decesos Santalucia Seguro Decesos AXA Seguro Decesos Allianz Seguro Decesos Aegon
Capital 3.000€ 4.500€ 5.000€ 6.000€ 2,5% del capital total 3.000€

¿Qué es mejor el Seguro de Vida o el de Decesos?

Esta es una pregunta a la que no podemos dar respuesta, elegir entre un seguro y otro dependerá solo y únicamente de factores personales que afectan al asegurado.

No se puede o no se debe dar una respuesta contundente a esta pregunta, pues va a depender de lo que quiera el asegurado y su familia, qué quieren cubrir, qué quieren asegurar, como quieren que sea su vida tras el fallecimiento, cual es la motivación de contratarlo, condiciones de vida y personales que tienen y quieren.

Algunos factores a tener en cuenta al decidir entre la pólizas de seguro de vida o decesos incluyen: Tamaño de la familia y red de apoyo, edad, estado de salud, ocupación, riesgos o presupuesto.

En definitiva, los seguros de vida y los de decesos protegen contra diferentes riesgos, aunque ambos ayudan a asegurar el futuro económico de su familia en caso de fallecimiento. El seguro de vida ofrece una cobertura más completa y el seguro de decesos ofrece una cobertura más básica pero también es un seguro considerablemente más barato.

Además, es importante recordar que el seguro de vida es una inversión a largo plazo para garantizar la seguridad financiera de tus seres queridos en caso de que ya no estés presente. Por lo tanto, es esencial que antes de contratar un seguro de vida, tengas en cuenta tus necesidades y la de tus seres queridos. Si estás buscando un seguro que cubra los gastos de decesos directamente, entonces necesitas considerar contratar un seguro de decesos en lugar de un seguro de vida.

De hecho, son seguros complementarios, muchas personas contratan ambos seguros para poder cubrir a sus herederos económicamente y liberarlos de los trámites posteriores al fallecimiento.

También es importante elegir una aseguradora de confianza con un sólido historial y un excelente servicio al cliente.

El seguro de decesos tiene más coberturas en caso de fallecimiento

Hay una cosa importante o fundamental para entender un seguro de decesos, y es que no cubre solo el coste del funeral. Es un tipo de seguro que profundiza en lo que es el servicio de sepelio, se encarga de gestionar todo el entierro o incineración, de conseguir flores, coche fúnebre, sala tanatorio, sudario, nicho, lápida… no solo es ofrecer un funeral, sino hacerlo de la forma en que el fallecido y sus familiares quieren, adaptado a sus usos y costumbres.
Además es la posibilidad de contar con asesoramiento y gestores especializados que ayudan en todo momento a los familiares desde el fallecimiento.

El seguro de decesos se encarga de tramitar y obtener:

  • Certificado de defunción
  • Certificado de nacimiento
  • Certificado de Registro de Actos de Últimas Voluntades
  • Baja del Libro de Familia
  • Certificado de matrimonio
  • Certificado de convivencia
  • Pensión de viudedad
  • Pensión de orfandad
  • Fe de vida
  • Pago del Impuesto de Sucesiones
  • Certificados médicos

Estos son solo algunos de los documentos que las pólizas de decesos te ayudarán a gestionar, para que puedas gestionar todos los trámites legales que hay tras un fallecimiento.

Además de ofrecer una cobertura psicológica enfocada al duelo para todos los familiares del asegurado. Ayudándoles a aceptar la pérdida, a trabajar emociones como el dolor o la ansiedad, a adaptarse a la nueva realidad y dándoles apoyo continuado.

Hasta aquí te hemos contado cuales son las ventajas de uno y otro seguro.
El seguro de vida es algo más amplio, más caro pero también permite cubre la invalidez absoluta y no limita su uso, el seguro de decesos ofrece algo más que una indemnización económica tras el fallecimiento del tomador, ofrece un servicio integral post fallecimiento, para la gente que busca ofrecer la mejor despedida para sus seres queridos, el seguro de decesos es la mejor alternativa y la más económica.

¿Y el seguro de hogar cubre el fallecimiento?

En algunos casos sí cubren el fallecimiento del titular, aunque no es lo más habitual. Esta cobertura se encontraría dentro de la garantía de accidentes corporales o domésticos, y aunque algún seguro de casa sí que ofrece indemnización por invalidez o fallecimiento por un accidente doméstico, lo habitual es que sea una cobertura de responsabilidad civil, que ofrece esta indemnización pero por accidentes de terceros.
En caso de que sí lo cubren, ofrecen un capital para los familiares del asegurado, si este fallece por un accidente doméstico como una caída, golpe, electrocución, ahogamiento… Por otro lado, lo que muchos seguros incluyen es cubrir los gastos sanitarios derivados de uno de estos casos, no directamente ofrecen una indemnización.



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